NOVENA SEMANA
PRIMERA LECTURA
LA ESTRUCTURA DE LAS
REVOLUCIONES CIENTÍFICAS
T.S. Kuhn
GLOSARIO
1.
PARADIGMA:
Modelo o patrón aceptado.
Un paradigma es lo que comparten los miembros
de una comunidad científica y, a la inversa, una comunidad científica consiste
en personas que comparten un paradigma. Éstos pueden ser descubiertos,
entonces, analizando el comportamiento de una comunidad dada.
2.
COMUNIDAD CIENTÍFICA:
Según Kuhn, una comunidad científica consiste
en quienes buscan nuevos conocimientos científicos. El conocimiento científico se halla como
sujeta a teorías y la reglas; se ofrecen problemas para darle facilidad a su
aplicación. Los científicos resuelven los enigmas o misterios modelándolos
sobre anteriores soluciones de enigmas.
3.
CIENCIA NORMAL
Investigación basada firmemente en una o más
realizaciones científicas pasadas, reconocidas por alguna comunidad científica.
La naturaleza de la ciencia Prioridad de los paradigmas Consiste simplemente en
el uso de la teoría existente para predecir información fáctica. El trabajo
bajo el paradigma, no puede llevarse a cabo en ninguna otra forma y la
deserción del paradigma significa dejar de practicar la ciencia que se define.
Y llevar a una anormalidad en la ciencia.
Comparar los paradigmas de la comunidad, unos
con otros y con sus informes de investigación; con el objetivo de descubrir que
elementos aislables, explícitos o implícitos pueden haber abstraído los
miembros de esa comunidad, para emplearlos como reglas en sus investigaciones.
4.
ANOMALIAS:
Una anomalía es un problema cuya solución satisfactoria
no es posible en el contexto de la ciencia normal del paradigma. Son fenómenos
nuevos, inesperados. También pueden ser interpretados como contraejemplos o
como diría Popper, la falsación de teorías científicas.
La presencia de anomalías será el inicio de
periodos de crisis.
No encuentran una respuesta satisfactoria y
obligan a postergar a veces indefinidamente su solución.
5.
CRISIS
Una vez que el descubrimiento es asimilado,
los científicos están en condiciones de explicar una gama más amplia de fenómenos
naturales, o explicar con mayor precisión algunos de los ya conocidos;
descartando, para lograr su objetivo, creencias y procedimientos aceptados con
anterioridad.
6.
LA RESPUESTA A LA
CRISIS
La crisis es la condición previa y necesaria
para el nacimiento de nuevas teorías. La decisión de rechazar o de aceptar un
paradigma y el juicio que conduce a esa decisión, involucra siempre la
comparación de paradigmas con la naturaleza y entre ellos. El rechazar un
paradigma sin reemplazarlo con otro, es rechazar a la ciencia misma. Kuhn
sostiene que los enigmas existen sólo debido a que ningún paradigma resuelve
completamente todos los problemas. La proliferación de versiones de paradigmas,
síntoma de crisis, debilita las reglas de la resolución normal de enigmas, de
tal modo que, permite la aparición de un nuevo paradigma.
Su objeto es resolver un enigma para que la
existencia misma suponga la validez del paradigma. Las crisis debilitan los
estereotipos y proporcionan los datos adicionales necesarios para un cambio de
paradigma fundamental. La transición consiguiente a un nuevo paradigma, es lo
que Kuhn llama, revolución científica.
7.
REVOLUCIÓN CIENTÍFICA
Revolución científica es cuando un paradigma
antiguo es reemplazado completamente o en parte, por otro nuevo, es decir,
cuando un paradigma existente deja de funcionar de forma adecuada. Cuando los
paradigmas entran en debate sobre su elección, para Kuhn, su función necesaria
es circular y sostiene que, sea cual fuere su fuerza.
Las razones por las cuales una nueva teoría
científica debe exigir el rechazo de un paradigma más antiguo, es para no caer
en el mal funcionamiento que puede conducir a la crisis a una previa
revolución. Pero sucederá que una parte se aferre al estado de cosas antes
existentes y defiendan el modelo objeto de cuestionamiento, pues una revolución
científica rechaza un paradigma y acepta a otro.
Como Kuhn dice: Los cambios de paradigmas
hacen que los científicos vean el mundo de investigación, que les es propio de
manera diferente. Una revolución científica es por lo tanto una ruptura
violenta. Es un episodio de desarrollo traumático a través del cual la
comunidad científica decide rechazar un modelo y aceptar otro, contemplando
como consecuencia el mundo de una manera totalmente diferente.
8.
IDEOLOGIA
Las ideas de Kuhn se pueden resumir por medio
de un número simple de puntos:
“Si se considera a la historia como algo más
que un depósito de anécdotas o cronología, puede producir una transformación
decisiva de la imagen que tenemos actualmente de la ciencia De acuerdo a la
historia normal la historia es una acumulación de hechos.
Las teorías descartadas no dejan de ser
científicas por más disparatadas que parezcan en la actualidad; en su tiempo y
con el conocimiento y opiniones de su tiempo son sumamente lógicas. La ciencia, su historia no son una
acumulación de conocimientos a través del tiempo si no cambios de paradigma en
el mismo. Existe una revolución del conocimiento acumulado al cambio continuo
de paradigmas.
El método científico puede dar hipótesis e
investigación pero dependiendo de la educación y punto de vista del
observador. Razón por la cual distintos paradigmas surgen de un nuevo
fenómeno. El cambiar la teoría existente por una teoría nueva no solo significa
una nueva explicación del universo si no en muchos casos una reinvención de
teorías y normas que la rigen, una reinvención de los hechos y fenómenos vistos
por la teoría.
Para analizar un paradigma y su historia se
necesita poner de manifiesto la integridad histórica de esa misma teoría en la
época en que se desarrolló.
9.
LAS CONCLUSIONES DE LAS REVOLUCIONES
CIENTIFICAS
Para Kuhn, la ciencia es el resultado de un
proceso sucesivo y en constante evolución, dentro del cual, se ubican
fenómenos, a los que este filósofo denominó como: paradigmas, comunidad
científica, crisis, revolución científica. Creemos necesario formular una
conclusión, donde se expongan, a modo de resumen, los conceptos más destacados
de la obra de Thomas Kuhn.
Su obra marcó una nueva etapa en la historia
de la ciencia y en la filosofía; y supo llegar al interés de los hombres
estudiosos de las distintas disciplinas, creando nuevos elementos útiles para
las investigaciones científicas del presente.
somos capaces de apoyar las ideas de su
obra?, que aún siguen vigentes, y es más, compartimos con él, que la ciencia,
en la medida que es tal, es un proceso evolutivo, y que para descubrir lo que
ella nos deparará, será sólo cuestión de esperar el transcurrir del tiempo posiblitar
el surgimiento de una nueva revolución científica.
Para kuhn la acumulación de anomalías de un
paradigma crea un ambiente de crisis, la crisis de un paradigma significa que
esta errónea, y puede ser reemplazado por otro paradigma mas certero, esto
posibilita el progreso de la ciencia y la revolución científica.
RESUMEN
III. NATURALEZA DE LA CIENCIA NORMAL
Kuhn
parte de la pregunta “¿Cuál es pues la naturaleza de la investigación más
profesional y esotérica que permite la aceptación por un grupo de un paradigma
único?”
Y
para responderse a esta interrogante parte de la definición de “paradigma”, que
inicialmente lo define como modelo o patrón aceptado usando “éste término” a
falta de otro mejor, y en una ciencia es un objeto raramente renovable. Aunque
afirma, “debemos reconocer lo muy limitado que puede ser un paradigma en
alcance y precisión en el momento de su primera aparición. Los paradigmas
obtienen su status como tales, debido a que tienen más éxito que sus
competidores para resolver unos cuantos problemas que el grupo de profesionales
ha llegado a reconocer como agudos”.
“Pero
el tener más éxito no quiere decir que tenga un éxito completo en la resolución
de un problema determinado o que dé resultados suficientemente satisfactorios
con un número considerable de problemas. El éxito de un paradigma es al
principio, en gran parte, una promesa de éxito discernible en ejemplos
seleccionados y todavía incompletos. La ciencia normal consiste en la
realización de esa promesa, una realización lograda mediante la ampliación del
conocimiento de aquellos hechos que el paradigma muestra como particularmente
reveladores, aumentando la extensión del acoplamiento entre esos hechos y las
predicciones del paradigma y por medio de la articulación ulterior del
paradigma mismo”.
Y
dichos paradigmas requieren “trabajo de limpieza”. “Las operaciones de limpieza
son las que ocupan a la mayoría de los científicos durante todas sus carreras.
Constituyen lo que llamo aquí ciencia normal”. “Y esa empresa parece ser un
intento de obligar a la naturaleza a que encaje dentro de los límites
preestablecidos y relativamente inflexible que proporciona el paradigma.
Ninguna parte del objetivo de la ciencia normal está encaminada a provocar
nuevos tipos de fenómenos; en realidad, a los fenómenos que no encajarían
dentro de los límites mencionados frecuentemente ni siquiera se los ve”.
“Tampoco
tienden normalmente los científicos a descubrir nuevas teorías y a menudo se
muestran intolerantes con las formuladas por otros. Es posible que sean
defectos. Pero esas restricciones, nacidas de la confianza en un paradigma,
resultan esenciales para el desarrollo de una ciencia”. Porque “obliga a los
científicos a investigar alguna parte de la naturaleza de una manera tan
detallada y profunda que sería inimaginable en otras condiciones”.
La
ciencia normal, para Kuhn, enfoca su vista en un “cuadro pequeño de problemas”
y son tres los focos de su investigación:
1. “Hechos
que el paradigma ha mostrado que son particularmente reveladores de la
naturaleza de las cosas”, “para determinarlos con mayor precisión y en variedad
de situaciones” (Ej En astronomía: posición, magnitud de estrellas etc; en química:
composición y combinación de pesos…) Tratan de establecer coherencia entre el
paradigma y la naturaleza de las cosas.
2. Determinaciones
fácticas, aquellas que pueden “compararse directamente con predicciones de la teoría del paradigma”. Dichas predicciones
llevan a descubrir nuevos campos de investigación (Ejem Telescopios especiales
para probar las predicciones de Copérnico; la máquina de Atwood para la
demostración de la segunda ley de Newton)
3.
Una tercera labor de limpieza del paradigma son
las “tareas de reunión de hechos de la ciencia normal”. Consiste en articular
la teoría del paradigma, “resolviendo algunas de sus ambigüedades residuales y
permitiendo resolver problemas hacia los que anteriormente sólo se había
llamado la atención. Esta clase resulta la
más importante de todas y su descripción exige una subdivisión”.
a) La
determinación de constantes físicas (universales): Ej. Las leyes gravitaciones a
partir del trabajo de Newton)
b) La
determinación de leyes cuantitativas: (Ej. la ley de Boyle que relaciona la presión del gas con el volumen)
c) La
determinación de aspectos cualitativos (Ej. las aplicaciones del paradigma de
la teoría calórica, fueron el calentamiento y el enfriamiento por medio de
mezclas del cambio de estado. Pero el
calor podía ser soltado o absorbido de muchas otras maneras—p. ej. por medio de
combinaciones químicas, por fricción y por compresión o absorción de un gas— y
la teoría podía aplicarse a cada uno de esos otros fenómenos de varias formas).
A
continuación Kuhn nos habla de “los problemas teóricos que trata la ciencia
normal que caen muy aproximadamente dentro de las mismas clases que los
experimentales o de observación. Una parte del trabajo teórico normal, aunque
sólo una parte pequeña, consiste simplemente en el uso de la teoría existente
para predecir información fáctica de valor intrínseco. El establecimiento de
efemérides astronómicas, el cálculo de las características de las lentes y la
producción de curvas de propagación de radio son ejemplos de problemas de ese
tipo”. Y “su fin mostrar una nueva aplicación del paradigma o aumentar la
precisión de una aplicación que ya se haya hecho. La necesidad de este tipo de
trabajo nace de las enormes dificultades que frecuentemente se encuentran para
desarrollar puntos de contacto entre una teoría y la naturaleza”.
Afirma
también Kuhn que “en todas las ciencias han tenido lugar, repetidamente,
reformulaciones similares de un paradigma; pero la mayoría de ellas han
producido cambios más substanciales del paradigma” (…). “Tales cambios son el
resultado del trabajo empírico previamente descrito como encaminado a la
articulación de un paradigma. En realidad, la clasificación de ese tipo de
trabajo como empírico fue arbitraria”.
Estas
tres clases de problemas -la determinación del hecho significativo, el
acoplamiento de-los hechos con la teoría y la articulación de la teoría-
agotan, creo yo, la literatura de la ciencia normal, tanto empírica como
teórica. Por supuesto, no agotan completamente toda la literatura de la
ciencia. Hay también problemas extraordinarios y su resolución puede ser la que
hace que la empresa científica como un todo resulte tan particularmente
valiosa. Pero los problemas extraordinarios no pueden tenerse a petición;
surgen sólo en ocasiones especiales, ocasionados por el progreso de la
investigación normal.
Por
consiguiente, es inevitable que una mayoría abrumadora de los problemas de que
se ocupan incluso los mejores científicos, caigan habitualmente dentro de una
de las tres categorías que hemos mencionado. El trabajo bajo el paradigma no
puede llevarse a cabo en ninguna otra forma y la deserción del paradigma
significa dejar de practicar la ciencia que se define”.
V. PRIORIDAD DE LOS PARADIGMAS
La
ciencia, para su desarrollo, requiere:
Primera etapa: Determinar los
paradigmas compartidos “La ciencia normal puede determinarse en parte por medio
de la inspección directa de los paradigmas, proceso que frecuentemente resulta
más sencillo con la ayuda de reglas y suposiciones, pero que no depende de la
formulación de éstas. En realidad, La existencia de un paradigma ni siquiera
debe implicar la existencia de algún conjunto completo de reglas”.
Segunda
etapa: Determinar las reglas compartidas. Causan “gran dificultad en
descubrirlas” y son “una fuente de frustración continua y profunda”.
La falta de una
interpretación ordinaria o de una reducción aceptada a reglas, no impedirá que
un paradigma dirija las investigaciones.
“Los paradigmas podrían
determinar la ciencia normal sin intervención de reglas descubribles”. Y son
cuatro “las razones para creer que los paradigmas funcionan realmente en esa
forma.”
“La primera, es la gran
dificultad para descubrir las reglas que han guiado a las tradiciones
particulares de la ciencia normal. Esta dificultad es casi la misma que la que
encuentra el filósofo cuando trata de explicar qué es lo que tienen en común
todos los juegos”.
“La segunda, de la que la
primera es realmente un corolario, tiene sus raíces en la naturaleza de la
educación científica. Como debe ser obvio ya, los científicos nunca aprenden
conceptos, leyes y teorías en abstracto y por sí mismos”.
La tercera razón: “La ciencia
normal puede seguir adelante sin reglas sólo en tanto la comunidad científica
pertinente acepte sin discusión las soluciones de los problemas particulares
que ya se hayan llevado a cabo. Por consiguiente, las reglas deben hacerse
importantes y desaparecer la despreocupación característica hacia ellas,
siempre que se sienta que los paradigmas o modelos son inseguros”.
La cuarta: “Las reglas
explícitas, cuando existen, son generalmente comunes a un grupo científico muy
amplio; pero no puede decirse lo mismo de los paradigmas”
VI. LA ANOMALÍA Y LA EMERGENCIA DE
LOSDESCUBRIMIENTOS CIENTÍFICOS
Kuhn afirma que, “La ciencia
normal no tiende hacia novedades fácticas o teóricas y, cuando tiene éxito, no
descubre ninguna. (…) Sin embargo, la investigación científica descubre
repetidamente fenómenos nuevos e inesperados y los científicos han inventado,
de manera continua, teorías radicalmente nuevas”. La historia lo sugiere. (…) “Esto
es lo que hacen las novedades fundamentales fácticas y teóricas”, que para él
son inesperados e inadvertidos y que hacen que la ciencia pase a ser otra. Y se
plantea la pregunta “¿cómo tienen los cambios que hacen que la ciencia sea otra?”.
Su respuesta va a ser que “al examinar en el resto de esta sección
descubrimientos seleccionados, descubriremos rápidamente que no son sucesos
aislados, sino episodios extensos, con una estructura que reaparece
regularmente. El descubrimiento comienza con la percepción de la anomalía; o
sea, con el reconocimiento de que en cierto modo la naturaleza ha violado las
expectativas, inducidas por el paradigma, que rigen a la ciencia normal. A
continuación, se produce una exploración más o menos prolongada de la zona de
la anomalía. Y sólo concluye cuando la teoría del paradigma ha sido ajustada de
tal modo que lo anormal se haya convertido en lo esperado. La asimilación de un
hecho de tipo nuevo exige un ajuste más que aditivo de la teoría y en tanto no
se ha llevado a cabo ese ajuste—hasta que la ciencia aprende a ver a la
naturaleza de una manera diferente—, el nuevo hecho no es completamente científico”.
Y a continuación narra como
ejemplo de la historia del proceso e intervinientes en el descubrimiento del
oxígeno en la década del 70 del siglo XVIII, aunque fue en el siglo XIX cuando
se completó el descubrimiento. Y se pregunta ¿Quién y cuando se descubrió el
oxigeno? Y después de describir una serie de hechos y personajes concluye que no
existen respuestas para preguntas de ese tipo.
Aunque está claro es y es
correcta la frase <<“El oxígeno fue descubierto” induce a error, debido a que sugiere que el
descubrir algo es un acto único y simple, asimilable a nuestro concepto
habitual de la visión (y tan discutible como él). Por eso suponemos con tanta
facilidad que el descubrir, como el ver o el tocar, debe ser atribuible de
manera inequívoca a un individuo y a un momento dado en el tiempo. Pero la
última atribución es siempre imposible y la primera lo es con frecuencia.
Ignorando a Scheele, podemos decir con seguridad que el oxígeno no fue
descubierto antes de1774 y podríamos decir también, probablemente, que fue
descubierto aproximadamente en 1777 o muy poco tiempo después de esta
fecha>>.
En otras palabras para Kuhn,
un descubrimiento no puede atribuirse a una persona ni inscribirse en un
momento dado, ya que, para él, es un proceso
complejo que incorpora los tres momentos: la percepción de la anomalía, la
exploración de ella y la producción de teoría para explicarla.
Para afianzar su afirmación,
de que los descubrimientos no son hechos puntuales acaecidos en un momento
determinado, sino que son procesos
graduales y complejos, Kuhn apela a otros
dos ejemplos: el descubrimiento por Roentgen de los rayos X
y el descubrimiento de la botella de Leiden. Es más, dice que “el de los rayos
X, es un caso clásico de descubrimiento por medio de un accidente, un tipo de
descubrimiento que tiene lugar con mayor frecuencia de lo que nos permiten
comprender las normas impersonales de la información científica”.
En el caso de los rayos X (Roentgen
y Lavoisier), “la percepción de la anomalía -o sea, un fenómeno para el que el
investigador no estaba preparado por su paradigma- desempeñó un papel esencial
en la preparación del camino para la percepción de la novedad. Pero, también en
estos dos casos, la percepción de que algo andaba mal fue sólo el preludio del
descubrimiento”. Y se pregunta, “¿en qué sentido puede decirse que la
asimilación de ese descubrimiento haya hecho necesario un cambio del
paradigma?” Su respuesta de hecho es
afirmativa.
En todos los ejemplos de
descubrimientos que menciona, aún el descubrimiento de la botella de Leyden,
dice Kuhn, poseen características que incluyen: “la percepción previa de la
anomalía, la aparición gradual y simultánea del reconocimiento tanto conceptual
como de observación y el cambio consiguiente de las categorías y los
procedimientos del paradigma, acompañados a menudo por resistencia”.
El surgimiento de anomalías
percibidas coincidentemente y simultáneamente por diversos científicos mueve
también a reflexión a Kuhn, y concluye que estos hechos llevan al progreso de
la ciencia normal.
VII. LAS CRISIS Y LA EMERGENCIA DE LAS TEORÍAS CIENTÍFICAS
Kuhn empieza éste capítulo
afirmando que “TODOS los descubrimientos examinados en la Sección VI fueron
causas de cambio de paradigmas o contribuyeron a él”.
Después de que el
descubrimiento habría sido asimilado (los nuevos paradigmas), los científicos
se encontrarían en “condiciones de explicar una gama más amplia de fenómenos
naturales o de explicar con mayor precisión algunos de los previamente
conocidos. Pero este avance se logró sólo descartando ciertas creencias y procedimientos
previamente aceptados y, simultáneamente, reemplazando esos componentes del paradigma
previo por otros. He insistido ya en que los cambios de este tipo están
asociados a todos los descubrimientos logrados por la ciencia normal,
exceptuando sólo los no sorprendentes, previstos en todo, con excepción de los
detalles. Sin embargo, los descubrimientos no son las únicas fuentes de esos
cambios”. Aunque también “hay cambios similares pero generalmente mucho
mayores”, que formulan nuevas teorías.
En otras palabras la
actividad científica no se reduce a la ciencia normal. A lo largo de la
historia, la ciencia ha enfrentado situaciones novedosas, provocadas por el
descubrimiento de fenómenos inesperados, que llevan a los investigadores a
formular nuevas teorías. Kuhn afirma que “la percepción de la anomalía
desempeña un papel en la aparición de nuevos tipos de fenómenos, no deberá
sorprender a nadie que una percepción similar, aunque más profunda, sea un
requisito previo para todos los cambios aceptables de teoría. Creo que en este
punto, las pruebas históricas son absolutamente inequívocas”.
Kuhn airma que: “El estado de
la astronomía de Tolomeo era un escándalo, antes del anuncio de Copérnico. Las
contribuciones de Galileo al estudio del movimiento dependieron estrechamente
de las dificultades descubiertas en la teoría aristotélica por los críticos
escolásticos. Newton sobre la luz y el color tuvo su origen en el
descubrimiento de que ninguna de las teorías existentes antes del paradigma
explicaban la longitud del espectro, y la teoría de las ondas, que reemplazó a
la de Newton, surgió del interés cada vez mayor por las anomalías en la
relación de los efectos de difracción y polarización con la teoría de Newton”.
En sintonía, pues, con Kuhn,
el origen de estos descubrimientos está en la percepción de una anomalía; es
decir, de un hecho que pone en tela de juicio aspectos fundamentales de la
tradición, inaugurando una etapa de crisis que puede conducir a una revolución
científica. Sin embargo, no todas las anomalías provocan graves conflictos. La
mayoría de las dificultades que enfrentan los científicos dentro de un periodo
de ciencia normal son resueltas con las herramientas y los procesos propios del
paradigma.
En el caso en que,
ciertamente, se detecte una anomalía que genere una crisis, ningún paradigma
será capaz de guiar las investigaciones. En este período, los científicos
dedicarán sus esfuerzos a probar distintos métodos y elaborar nuevas teorías
para dar solución a la crisis, estableciendo un nuevo paradigma. “La
proliferación de versiones de una teoría es un síntoma muy usual de crisis. En
su prefacio, Copérnico se quejaba también de ello”. Y la proliferación de crisis lleva, a un paradigma,
a la pérdida gradual de su status único.
Una “teoría nueva parece una respuesta directa a la crisis” (Ej. La teoría de
la relatividad de Einstein).
Kuhn asevera que “los
problemas con respecto a los que se presentan los derrumbamientos, son todos de
un tipo reconocido desde mucho tiempo antes. La práctica previa de la ciencia
normal proporciona toda clase de razones para creerlos resueltos o casi
resueltos, lo cual contribuye-a explicar por qué el sentimiento de fracaso, al
producirse, pudo ser tan agudo. El fracaso con un problema nuevo es, a veces,
decepcionante; pero nunca sorprendente”. El significado de las crisis es la
indicación que proporcionan de que ha llegado la ocasión para rediseñarlas
herramientas para enfrentar” (el problema y revisar el paradigma).
Así, después de recorrer y
analizar los ejemplos concernientes a: la teoría de Lavoisier sobre la
combustión del oxígeno, y a la teoría de la relatividad de Einstein, Kuhn
realiza las siguientes observaciones generales:
1) "Sólo
surgió una nueva teoría después de un fracaso notable de la actividad normal de
resolución de problemas";
2) El
derrumbamiento y proliferación de teorías tuvieron lugar antes de la
enunciación de la nueva teoría;
3) Los
problemas que no lograban ser resueltos por la teoría habían logrado ser
reconocidos desde mucho tiempo antes a la aparición de la nueva teoría.
VIII. LA RESPUESTA A LA CRISIS
Kuhn
parte del “supongamos que las crisis son una condición previa y necesaria para
el nacimiento de nuevas teorías y preguntémonos después cómo responden los
científicos a su existencia”. Se responde afirmando que los científicos se
aferran a sus paradigmas y nunca tratan las anomalías como ejemplos en
contrario, “ni siquiera cuando se enfrentan a anomalías graves y prolongadas”.
Los científicos sólo aceptaran la invalidez de
una teoría "cuando se dispone de un candidato alternativo para que ocupe
su lugar.
Kuhn
indica que el científico tiene que tener
la capacidad de vivir "en un mundo desordenado", capacidad que
denomina como la "tensión esencial" presente en la investigación
científica". “Una vez descubierto un primer paradigma a través del cual
ver la naturaleza, no existe ya la investigación con ausencia de paradigmas. El
rechazar un paradigma sin reemplazarlo con otro, es rechazar la ciencia misma.
Ese acto no se refleja en el paradigma sino en el hombre. De manera inevitable,
será considerado por sus colegas como "el carpintero que culpa a sus
herramientas".
Kuhn se
pregunta: "¿Qué es lo que diferencia a la ciencia normal de la ciencia en
estado de crisis?". En el caso de la ciencia normal, los ejemplos en contrario
constituyen los enigmas,(…) los cuales pueden ser, sin duda alguna, fuentes
de crisis: ´Copérnico consideró ejemplos en contrario lo que la mayor parte de
los demás seguidores de Tolomeo habían considerado como enigmas en el ajuste
entre la observación y la teoría´"
“Seguramente,
no el hecho de que la primera no se enfrente a ejemplos en contrario. A la
inversa, lo que hemos llamado con anterioridad los enigmas que constituyen la
ciencia normal, existen sólo debido a que ningún paradigma que proporcione una
base para la investigación científica resuelve completamente todos sus problemas.
En los pocos casos en que parecen haberlo hecho (p. ej. la visión geométrica),
pronto han dejado de constituir problemáticas para la investigación y se han
convertido en instrumentos para el trabajo práctico”.
Kuhn
continua, “podemos señalar dos razones por las quela ciencia parece haber
proporcionado un ejemplo tan adecuado de la generalización de que la verdad y
la falsedad se determinan únicamente y de manera inequívoca, por medio de la
confrontación del enunciado con los hechos. La ciencia normal se esfuerza y
deberá esforzarse continuamente por hacer que la teoría y los hechos vayan más
de acuerdo y esta actividad puede verse fácilmente como una prueba o una
búsqueda de con filmación o falsedad. En lugar de ello, su objeto es resolver
un enigma para cuya existencia misma debe suponerse la validez del paradigma.
El no lograr una solución desacredita sólo al científico, no a la teoría”.
En otras
palabras, todas las teorías se ven confrontadas continuamente por ejemplos en
contrario. De modo que la diferencia entre la ciencia normal y la ciencia en
estado de crisis puede referirse diciendo que la ciencia en estado normal
apuesta por la concordancia entre teoría y experiencia, buscando enfrentar los
enigmas, en distintas formas, muchas veces no concluyentes ni exentas de
discrepancias. Así, para ilustrar esta condición, Kuhn refiere ejemplos donde
la ciencia normal pudo albergar anomalías y hasta relegar su solución a
momentos posteriores.
Kuhn
dice “que para que una anomalía provoque crisis, debe ser algo más que una
simple anomalía. Siempre se presentan dificultades en alguna parte en el ajuste
del paradigma con la naturaleza; la mayoría de ellas se resuelven tarde o
temprano, frecuentemente por medio de procesos que no podían preverse. Es raro
que el científico que se detenga a examinar todas las anomalías que descubra
pueda llevar a cabo algún trabajo importante. Debemos por consiguiente
preguntarnos qué es lo que hace que una anomalía parezca merecer un examen de
ajuste y para esta pregunta es probable que no exista una respuesta
absolutamente general. Los casos que ya hemos examinado son característicos,
pero raramente prescriptivos. A veces, una anomalía pondrá claramente en tela
de juicio generalizaciones explícitas y fundamentales de un paradigma, como lo
hizo el problema del arrastre de léter para quienes aceptaban la teoría de
Maxwell. O como en la revolución de Copérnico, una anomalía sin aparente
importancia fundamental, puede provocar crisis si las aplicaciones que inhibe
tienen una importancia práctica particular, en este caso para el calendario y
la astrología. O, como en la química del siglo XVIII, el desarrollo de la
ciencia normal puede transformar una anomalía que, anteriormente, había sido sólo
una molestia, en causa de crisis: el problema de las relaciones de pesos tuvo
un status muy diferente después de la evolución de las técnicas químicas
neumáticas. Probablemente, hay todavía otras circunstancias que pueden hacer
que una anomalía resulte especialmente apremiante y, ordinariamente, se combinarán
varias de ellas. Por ejemplo, ya hemos hecho notar que una de las causas de la
crisis a que se enfrentó Copérnico fue la sola duración del tiempo durante el
que los astrónomos se esforzaron, sin obtener resultados, en reducir las discrepancias
residuales del sistema de Ptolomeo”.
Cuando
por esas razones u otras similares, una anomalía llega a parecer algo más que
otro enigma más de la ciencia normal, se inicia la transición a la crisis y a
la ciencia fuera de lo ordinario. Entonces, la anomalía misma llega a ser
reconocida de manera más general como tal en la profesión”.
Aquí Kuhn, pues, afirma que las anomalías necesitan
un elemento adicional para provocar las crisis, sin embargo, no describe cuál
es ese elemento, sino que (continua) podemos decir que sucede cuando el ejemplo
en contrario no es asumido como un simple enigma por la ciencia normal y es
reconocido como anomalía por todos los investigadores.
“Cada
vez le presta mayor atención un número mayor de los hombres más eminentes del
campo de que se trate. Si continúa oponiendo resistencia, lo cual no sucede
habitualmente, muchos de ellos pueden llegar a considerar su resolución como el
objetivo principal de su disciplina. Para ellos, el campo no parecerá ser ya lo
que era antes. Parte de ese aspecto diferente es simplemente el resultado del
nuevo punto de enfoque del examen científico”
Así, el
paradigma comienza a ser cuestionado, situación que en algunos casos es
explícitamente reconocida por los científicos.
“A
través de esta proliferación de coyunturas divergentes (de manera cada vez más
frecuente llegarán a describirse como ajustes ad hoc), las reglas de la ciencia
normal se hacen cada vez más confusas. Aun cuando existe todavía un paradigma,
pocos de los que practican la ciencia en su campo están completamente de
acuerdo con él. Incluso las soluciones de algunos problemas aceptadas con
anterioridad se ponen en duda”.
Entonces,
Kuhn menciona, dos efectos que parecen
ser universales con respecto a las crisis de las ciencias: 1) Todas las crisis se
inician con la confusión creciente de un paradigma y el relajamiento
consecuente de sus reglas; 2) Todas las crisis concluyen con la aparición de un
nuevo paradigma y los esfuerzos por imponer su aceptación. “Y la aparición del
nuevo paradigma no constituye de ningún modo un proceso de acumulación, es más
bien una reconstrucción del campo, a partir de nuevos fundamentos,
reconstrucción que cambia algunas de las generalizaciones teóricas más
elementales del campo, así como también muchos de los métodos y aplicaciones
del paradigma”.
En la
transición misma, existirá un parecido considerable entre los problemas tratados
por ambos paradigmas, el viejo y el nuevo, sin embargo, existirá también una
diferencia radical respecto a las soluciones provistas por cada paradigma a
dichos problemas. Finalmente, una vez que se haya producido la transición de un
paradigma a otro, estaremos ante un nuevo su visión del campo (marco teórico),
un nuevo método
y nuevas aplicaciones prácticas.
Kuhn
asevera que las crisis son como “un preludio al surgimiento de nuevas teorías”.
Y con frecuencia, surge un nuevo paradigma, al menos en embrión, antes de que
una crisis haya avanzado mucho en su desarrollo o de que haya sido reconocida
explícitamente”. Asimismo todas las observaciones desarrolladas aquí son
"suficientes para mostrar cómo las crisis debilitan los estereotipos y,
simultáneamente, proporcionan los datos
adicionales necesarios para un cambio de paradigma fundamental"
Resumiendo,
Kuhn, formula distintas manifestaciones
de las crisis de la ciencia normal, en las cuales los científicos cambian su actitud
hacia los paradigmas existentes, con los que la naturaleza de la investigación
adopta nuevos rumbos.
Resumen elaborado por: Cecília Bustamante
No hay comentarios:
Publicar un comentario